Creo que llego la hora de cerrar una etapa, de darle un fin definitivo a todo esto, de cerrar el libro que juntos escribimos y pasar al tomo II.
Voy a contar una historia, ya repetida, gastada.
Erase una vez dos niños pequeños, el, perfecto, con su pelo negro, sus mejillas gordas, su tes pálida, sus ojos celestes como el cielo y sus pestañas arqueadas que llevaba a cualquier chica a soñar con ellas; ella, delgada, pequeña, sin grandes curvas, con ojos marrones grandes y profundos, su tes morena y su baja autoestima. Eran tan diferentes.
Un dia el destino los unio, cruzo sus caminos, se conocieron. Ella nunca penso que un chico como el la miraría, ella sentía ser invisible, ella nunca pensó que la querrían, pero el lo hizo. El hizo sentir que ella existia, el la vio como nadie la habia visto antes, el hizo sentir que por una vez en su vida era importante.
Ella quiso quererlo, quiso cuidarlo, quiso hacerle sentir que era todo su mundo.
Cuando estaba con èl, el cielo y la tierra desaparecian, podia sentir que flotaba en el aire y que no dependía de nada solo... de su mirada.
Pero un dia cayo de esa nube, cayo por el aire, cayo muy bajo hasta donde las equivocaciones toman cartas al respecto y... se equivoco.
Los impulsos se apoderaron de ella, la bronca hizo que estos impulsos sean mas fuertes, y se equivoco, y mucho.
Rogó a los dioses con lagrimas en sus ojos el perdon, pero la unica persona que podia darle ese perdon era el.
Paso el tiempo, ella se volvio oscura, triste, el borro su existencia de la vida de ella.
Tiempo despues se volvieron a encontrar, los sentimientos ahora reprimidos se hicieron notar, pero el rencor aun estaba presente. Intentaron taparlo con risas, juegos y besos, pero todo esto era debil a comparacion del rencor. Tal vez la herida fue tan grande que nada basto para remediarlo. Este rencor hizo que el tambien se equivoque y se volvieron a lastimar.
Y asi, por lapsos de tiempos ellos juntos eran felices luego caían a la realidad y todo era igual que siempre.
Tal vez algo que se rompe jamas vuelve a ser lo mismo, y ellos nunca tendrian que haber intentado volver estar juntos.
Se quisieron, se amaron, se equivocaron, pero a la vez tambien aprendieron.
Aprendieron a aprender del otro, aprendieron a que lo que se quiere no se lastima, aprendieron a que no hay que mentirle a quien se ama, aprendieron a pedir perdon, y aprendieron que las segundas partes nunca salen bien.
Paso el tiempo, ella se fue, uno de los motivos principales que tenia ella para irse es que no podia estar cerca de el y no tenerlo, necesitaba su mirada para sentirse real y al no tenerla, sentia no tener nada.
Ella se fue, el volvio.
Ella desconfiaba, pero lo amaba y siempre lo perdonaria.
Intentaron retomar la historia donde la habian dejado, pero hubo algo que lo impidio.
CAMBIARON, cambio el lugar, cambio el entorno, cambiaron las actitudes, cambiaron las personalidades, cambiaron los sentimientos.
Ya no eran esos dos niños pequeños de hace 4 años atras. Habian crecido, eran diferentes.
Y hay veces que las personas no se acostumbran a los cambios, y ella era una de esas personas, ella soñaba con volver a los antiguos momentos, a los antiguos juegos, pero no. Los momentos se volvieron mas cortos y los juegos se convirtieron en peleas.
Ya no era sano que esten juntos, no se hacian bien. Ya no se sentian unidos, ya no habia esa chispa entre ellos, ya no eran uno...
Ahora eran dos personas muy distintas, separadas pero unidas por recuerdos y residuos de un amor.
A veces hay cosas que desilusionan tanto, que hay que poner un alto.
Y ahi, fue cuando decidieron que ya nada iba a ser igual nunca mas, a si que tomaron sus caminos, volvieron a caminar solos pero con el aprendizaje y el recuerdo de aquel amor...
Es mejor prever el bien estar de los dos, que estar unidos y hacerse mal...
Nos veremos en otra vida, mi viejo amor!
Voy a contar una historia, ya repetida, gastada.
Erase una vez dos niños pequeños, el, perfecto, con su pelo negro, sus mejillas gordas, su tes pálida, sus ojos celestes como el cielo y sus pestañas arqueadas que llevaba a cualquier chica a soñar con ellas; ella, delgada, pequeña, sin grandes curvas, con ojos marrones grandes y profundos, su tes morena y su baja autoestima. Eran tan diferentes.
Un dia el destino los unio, cruzo sus caminos, se conocieron. Ella nunca penso que un chico como el la miraría, ella sentía ser invisible, ella nunca pensó que la querrían, pero el lo hizo. El hizo sentir que ella existia, el la vio como nadie la habia visto antes, el hizo sentir que por una vez en su vida era importante.
Ella quiso quererlo, quiso cuidarlo, quiso hacerle sentir que era todo su mundo.
Cuando estaba con èl, el cielo y la tierra desaparecian, podia sentir que flotaba en el aire y que no dependía de nada solo... de su mirada.
Pero un dia cayo de esa nube, cayo por el aire, cayo muy bajo hasta donde las equivocaciones toman cartas al respecto y... se equivoco.
Los impulsos se apoderaron de ella, la bronca hizo que estos impulsos sean mas fuertes, y se equivoco, y mucho.
Rogó a los dioses con lagrimas en sus ojos el perdon, pero la unica persona que podia darle ese perdon era el.
Paso el tiempo, ella se volvio oscura, triste, el borro su existencia de la vida de ella.
Tiempo despues se volvieron a encontrar, los sentimientos ahora reprimidos se hicieron notar, pero el rencor aun estaba presente. Intentaron taparlo con risas, juegos y besos, pero todo esto era debil a comparacion del rencor. Tal vez la herida fue tan grande que nada basto para remediarlo. Este rencor hizo que el tambien se equivoque y se volvieron a lastimar.
Y asi, por lapsos de tiempos ellos juntos eran felices luego caían a la realidad y todo era igual que siempre.
Tal vez algo que se rompe jamas vuelve a ser lo mismo, y ellos nunca tendrian que haber intentado volver estar juntos.
Se quisieron, se amaron, se equivocaron, pero a la vez tambien aprendieron.
Aprendieron a aprender del otro, aprendieron a que lo que se quiere no se lastima, aprendieron a que no hay que mentirle a quien se ama, aprendieron a pedir perdon, y aprendieron que las segundas partes nunca salen bien.
Paso el tiempo, ella se fue, uno de los motivos principales que tenia ella para irse es que no podia estar cerca de el y no tenerlo, necesitaba su mirada para sentirse real y al no tenerla, sentia no tener nada.
Ella se fue, el volvio.
Ella desconfiaba, pero lo amaba y siempre lo perdonaria.
Intentaron retomar la historia donde la habian dejado, pero hubo algo que lo impidio.
CAMBIARON, cambio el lugar, cambio el entorno, cambiaron las actitudes, cambiaron las personalidades, cambiaron los sentimientos.
Ya no eran esos dos niños pequeños de hace 4 años atras. Habian crecido, eran diferentes.
Y hay veces que las personas no se acostumbran a los cambios, y ella era una de esas personas, ella soñaba con volver a los antiguos momentos, a los antiguos juegos, pero no. Los momentos se volvieron mas cortos y los juegos se convirtieron en peleas.
Ya no era sano que esten juntos, no se hacian bien. Ya no se sentian unidos, ya no habia esa chispa entre ellos, ya no eran uno...
Ahora eran dos personas muy distintas, separadas pero unidas por recuerdos y residuos de un amor.
A veces hay cosas que desilusionan tanto, que hay que poner un alto.
Y ahi, fue cuando decidieron que ya nada iba a ser igual nunca mas, a si que tomaron sus caminos, volvieron a caminar solos pero con el aprendizaje y el recuerdo de aquel amor...
Es mejor prever el bien estar de los dos, que estar unidos y hacerse mal...
Nos veremos en otra vida, mi viejo amor!
